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04.05.2018

Cuidados en la alimentación de la perra gestante y lactante

Durante el embarazo, las perras sufren innumerables alteraciones

comportamentales, hormonales y físicas. Por eso, necesitan una nutrición

equilibrada, tanto para mantener la salud de la futura mamá, como para

asegurar que la camada nazca y crezca sana.

Algunas pistas sobre alimentación de la perra gestante y lactante ayudan

mucho en esta etapa. Lo primero que hay que hacer cuando se descubre el

embarazo, es sustituir el pienso normal por un alimento con más valor

energético y con nivel de proteína más elevado.

El alimento más indicado es un pienso para cachorros, pues además de

poseer más cantidad de proteína y energía, también la formulación es rica en

vitaminas y minerales y permite una digestión más fácil.

A partir de la cuarta semana de gestación, se debe aumentar la porción diaria,

para que al final de la gestación, ella esté consumiendo aproximadamente

40% más que la dosis indicada para su peso normal. Eso porque los

cachorros están desarrollando la musculatura, piel, pelos y ganando peso, y

necesitan proteína y energía disponible para ello.

Después del parto, la mamá necesita producir leche para la camada. En esta

etapa normalmente el dueño descuida la alimentación, lo cual genera

problemas a la perra, como la pérdida acentuada de peso y reducción de la

inmunidad, que pueden causar enfermedades oportunistas como infecciones

de piel por hongos y bacterias, otitis e incluso la caída de pelos.

En esta etapa, se debe aumentar, gradualmente, de semana a semana, la

cantidad de alimento ofrecida para que la mamá reciba todos los nutrientes

necesarios para el mantenimiento de su salud, inmunidad y peso. Además de

recibir nutrientes para la producción de leche para los cachorros.

Por lo tanto, se indica en la 1ª semana de lactación, 50% más de pienso que

la cantidad indicada para su peso normal, en la 2ª semana, 100% más, en la

3ª semana, 150% más y en la cuarta semana 200% más, y mantener así

hasta la 6ª semana, pues, normalmente, los cachorros empiezan a

alimentarse no solamente de leche.

A partir de esta etapa se debe reducir la cantidad de alimento ofrecida hasta el

destete total. Otra pista importante es que, con el avance de la gestación y el

aumento del volumen del útero, la vejiga, estómago e intestinos acaban

siendo comprimidos, por lo tanto, es indicado dividir la cantidad diaria de

alimento en varias comidas, para evitar la constipación y formación de gases

e incluso cólicos intestinales. Estos cuidados, aliados a ejercicios físicos

moderados, asegurarán una gestación y lactación tranquilas como también

cachorros fuertes y sanos.

Thiago Marçal Andrade e Silva

Médico veterinario graduado por la Universidade Federal de Santa Maria

Responsable Técnico de Nutrire Indústria de Alimentos Ltda.